Despierto en sueños congelados,
Por fin me saborea la realidad,
demasiado tarde, ha llegado el amanecer.
¿Ahora me importa?
¿Las reservas de la vida?
Despierto en sueños congelados,
por fin me saborea la realidad.
Siente tu locura, tú,
te ahogas al buscarme, esto es perdurable,
alimenta tu credo,
tú estás alimentado con preciosidades, obedece a tu pasado.
Me siento sin alma, sin sombra en la vida,
estos ojos no míos, me silenciaron,
acunada en dulzuras, esta vida,
vengan a mí preciosidades de la muerte,
yo te amo,
me siento sin alma, sin sombra en la vida,
estos ojos no míos, silencio.
Siente tu locura, tú,
te ahogas al buscarme, esto es perdurable,
alimenta tu credo,
tú estás alimentado con preciosidades, obedece a tu pasado.
Ya no veré más la mañana,
ya no anhelaré las noches,
Entregué mi cuerpo,
lancé mi alma a tus luces, tus luces,
lancé mi alma a tus luces, para ti.
A solas, despierto mortalmente congelado,
sólo quedan cicatrices en esta lucha,
que me coman tus locuras,
ustedes ya están muertos.
Dianne Van Giersbergen;
Artista de Holanda.
Fotografía del texto,
por Simone Von Field,
El Amanecer Enamorado.
