JOSÉ IGNACIO RENGIFO
GARZAS NEGRAS
LA BOTELLA VACÍA
Ya me tomé la botella de tu amor y
la lancé al mar de los dioses furiosos,
vacía y bonita la botella es engañosa,
pues todo me lo bebí y fue mar y sol,
engaños de amores a todos los enamorados
y yo fui el rey de los sueños de esa luz marina.
El poeta se murió riéndose a carcajadas.
Esa noche de fatigantes adioses sonaron las campanas,
sonaron con rabia despidiendo la alegría.
LÁGRIMAS QUE BAÑAN EL ALMA
Volveré en los tiempos, de inocencias,
de la rueda giratoria y volveré sobre mis pasos cansados,
silbando alegre, la canción del rebelde;
recordando la vida feliz de mi infancia.
Volveré a los sueños de espíritus, que habitan mis espacios,
recordándome sus historias de ríos, mares y campos.
Y seré la pieza del ajedrez que imaginé; El Rey.
Volveré con toda mi fantasía sobre la estrella, la yegua.
De mi padre, que en su locura abrazó los riscos y montañas,
de su pueblo verde de Alvarado.
Danzará mi cuerpo ágil del ayer sobre todas las mujeres,
que alguna vez me amaron con frenesí y todas juntas dirán,
que las noches y los días, fueron torrentes de calor.
José Ignacio Rengifo,
Artista de Colombia.
Pintura del texto,
por Jarvier Mejía,
Garzas Negras.
Ya me tomé la botella de tu amor y
la lancé al mar de los dioses furiosos,
vacía y bonita la botella es engañosa,
pues todo me lo bebí y fue mar y sol,
engaños de amores a todos los enamorados
y yo fui el rey de los sueños de esa luz marina.
El poeta se murió riéndose a carcajadas.
Esa noche de fatigantes adioses sonaron las campanas,
sonaron con rabia despidiendo la alegría.
LÁGRIMAS QUE BAÑAN EL ALMA
Volveré en los tiempos, de inocencias,
de la rueda giratoria y volveré sobre mis pasos cansados,
silbando alegre, la canción del rebelde;
recordando la vida feliz de mi infancia.
Volveré a los sueños de espíritus, que habitan mis espacios,
recordándome sus historias de ríos, mares y campos.
Y seré la pieza del ajedrez que imaginé; El Rey.
Volveré con toda mi fantasía sobre la estrella, la yegua.
De mi padre, que en su locura abrazó los riscos y montañas,
de su pueblo verde de Alvarado.
Danzará mi cuerpo ágil del ayer sobre todas las mujeres,
que alguna vez me amaron con frenesí y todas juntas dirán,
que las noches y los días, fueron torrentes de calor.
José Ignacio Rengifo,
Artista de Colombia.
Pintura del texto,
por Jarvier Mejía,
Garzas Negras.